La DGT publica los preocupantes resultados de su última campaña de vigilancia, centrada en el consumo de drogas en la conducción. Datos que hablan de un problema de consumo de drogas a nivel global.
El consumo de drogas en la conducción sigue siendo habitual
La DGT acaba de publicar los resultados de la última campaña de vigilancia del consumo de alcohol y drogas que se ha centrado en el control del transporte de mercancías y de personas. Lamentablemente, parece que a pesar de la información existente, de las numerosas campañas de sensibilización y de las medidas de vigilancia y ‘castigo’ que existen, sigue siendo habitual encontrar personas que conducen bajo los efectos del alcohol y otras drogas.
A diario encontramos casos de conductores multados por consumo de drogas al volante. Ayer mismo “Un conductor da positivo en 5 drogas en un control en Marcilla (Navarra)”.
Es por ello que la DGT (Dirección General de Tráfico) pone en marcha este tipo de campañas. Entre el 26 de febrero y el 4 de marzo la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil han llevado a cabo la operación especial de vigilancia de la DGT sobre el consumo de alcohol y drogas en la conducción,
Durante los siete días los agentes han controlado a 11.182 vehículos destinados a ambos tipos de transporte (mercancías y personas), de los cuales 2.990 fueron denunciados por no cumplir algunos de los preceptos de la normativa y otros 24 camiones fueron inmovilizados.
Entre los resultados, han detectado 16 conductores de camiones y 3 de autobuses que han dado positivo a drogas. Otros 8 dieron positivo a alcohol.
A la vista de los datos: “los positivos en drogas duplican a los positivos en alcohol”
Uno de cada cuatro vehículos destinados al transporte de mercancías y de personas ha sido denunciado por los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil durante la campaña de Tispol Truck-bus. Además, los agentes de tráfico han tramitado 550 denuncias por excesos de horas de conducción y 365 relacionadas con el tacógrafo.
En relación a otras imprudencias, 66 personas han sido denunciadas por no hacer uso del cinturón de seguridad y otros 42 por exceso de velocidad.
Consumo de drogas en España
Cuando reflexionamos acerca de estos datos, podemos extraer dos hipótesis principales:
- O bien las campañas de vigilancia se centran en un público, zona o sector del que ya se presupone un consumo de alcohol y drogas
- O bien el consumo de alcohol y drogas en España es más elevado de lo que, a priori, creemos
Según el Informe del país sobre drogas 2017, elaborado por el Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías:
- El 17,1% de los jóvenes de 15 a 34 años había consumido cannabis alguna vez en los últimos 12 meses.
- Es la cocaína la siguiente droga frecuencia de consumo: el 3% de los jóvenes de 15 a 34 años confiesa haber consumido cocaína en el último año.
- Los fallecimientos por sobredosis en España han repuntado desde 2011, llegando en 2014 a los 455 casos.
- En 2015 la cifra de personas Infractoras de la legislación sobre drogas denunciados en España ascendía a 411.157, siendo el 95% de estos casos denuncias por consumo y tenencia y el 5% restante por tráfico.
Según este informe “En España, a la inmensa mayoría de los infractores se les imputan faltas administrativas por posesión de drogas según la Ley de Protección de la Seguridad Ciudadana, mientras que solo una minoría de las denuncias son constitutivas de delito. Ocho de cada diez casos están asociados al cannabis.”
Los determinantes del género
Además, como podemos ver en los siguientes gráficos, existe una brecha de género en cuanto al consumo de drogas.

Los hombres consumen drogas con mucha más frecuencia que las mujeres, y esto indica que existen patrones culturales asociados al consumo de drogas, que en este caso, incentivan a los hombres con mayor intensidad que a las mujeres para el consumo de estupefacientes.

Predicar con el ejemplo
En la prevención del consumo de drogas, como en otros campos, es fundamental predicar con el ejemplo.
De nada sirve que le digas a tu hija adolescente que nunca debe coger el coche borracho, si después ve que tú lo coges con unos vinitos encima. Lamentablemente, cunado se trata de adoptar buenos hábitos que van en contra de nuestra ‘comodidad’ o de nuestros ‘deseos’, solemos buscar excusas -y una muy buena siempre ha sido copiar ‘lo que hacen los demás’-. El hecho de que una norma se cumpla sólo a veces, debilita la norma y propicia que más personas la dejen de cumplir.
El alcohol sigue siendo la droga más consumida en España. Podemos afirmar que beber alcohol forma parte de nuestra cultura, y es un hábito muy vinculado a nuestras fiestas, nuestras reuniones con amigos, familia, encuentros sociales, etc. El alcohol está presente en nuestras casas, en la TV, en los bares, etc. de modo que los niños y niñas se familiarizan rápido con esta sustancia, y al llegar a la adolescencia quizá se pregunten “si todos los mayores lo toman y parecen pasarlo tan bien ¿por qué no lo voy a hacer yo?”.
Actividad: Circuito con gafas de simulación de consumo de alcohol y drogas
Es por ello, que el problema del consumo de drogas al volante debe enmarcarse dentro de una problemática mayor, que es el consumo de drogas a nivel general. Es un tema que se debe abordar no sólo desde la vertiente punitiva -sin duda la justicia es la herramienta para resarcir parte del dolor de las víctimas, en el caso de conducción bajo los efectos del alochol-, sino sobre todo desde la educación en valores, la mejora de las oportunidades para los más jóvenes y el fomento de una cultura saludable.
Además, existen importantes áreas de trabajo, como es la concienciación vial en lo que a la vinculación de nuestros actos con sus consecuencias se refiere. Desde nuestra asociación, así como desde Fundtrafic, nuestra fundación, desarrollamos formaciones y charlas en las que damos voz a las víctimas de accidentes, que son un ejemplo y propician la empatía.